Barbastro celebrará el 12 de julio la festividad de san Cristóbal, el patrón de todos los que se ponen al volante de un vehículo, más allá de los transportistas profesionales. Los organizadores, encabezados por José Antonio Pueyo, han detallado en «La Mañana del Alto Aragón» un programa que busca mantener vivas estas tradiciones, considerándolas una forma de «colaborar en hacer ciudad» y fomentar la actividad social. «Barbastro tiene que ser una ciudad activa socialmente, es una forma también de socializarnos todos y de salir a la calle y darle vida a esta ciudad», ha afirmado
El plato fuerte de la jornada será el desfile de vehículos, que comenzará con la concentración de los participantes a las 19:30 horas en la rotonda de la Casa de la Iglesia. Media hora después, a las 20:00 horas, la caravana iniciará su recorrido por la Avenida Ejército Español, la Plaza Aragón, el Paseo del Coso y la calle General Ricardos.
Una de las grandes novedades de este año es la participación de Zaragoza Mobility City con un Ford Capri eléctrico, un prototipo que estará disponible para ser visitado y conocido por los asistentes al desfile. Además, Zaragoza Mobility City ofrecerá entradas gratuitas para su sede en el Pabellón Puente de Zaragoza, donde actualmente se exhibe una exposición sobre Ferrari. «Hemos conseguido que venga a Barbastro de tal manera que tengamos un Ford Capri eléctrico como un prototipo que pueda ser visitado, visto, comprobado y testeado incluso por los que vengan a ver el desfile», explicó Pueyo, extendiendo una invitación a los barbastrenses a ser «buenos anfitriones» de esta visita.
El punto álgido del desfile será la bendición de los vehículos junto al busto del General Ricardos, una imagen tradicional y emotiva. Una vez finalizada la bendición, la comitiva descenderá por la calle General Ricardos hasta el cruce del Cortés, donde se dará por concluido el acto.
La jornada festiva arrancará a las 18:00 horas con una celebración religiosa en el Santuario de El Pueyo, abierta a la participación de todos los que deseen honrar al patrón. José Antonio Pueyo hizo hincapié en el carácter popular de esta misa, invitando a la ciudadanía a subir al monasterio.
Tras el desfile, los organizadores han programado una cena de hermandad. Si bien cada asistente deberá sufragar su cubierto, la iniciativa busca fomentar la convivencia y el compañerismo entre los transportistas y todos los vecinos que se sienten parte de esta celebración. «Es una cena de hermandad para recordarnos y también para que el mundo del transporte y de los vecinos que se suman, hagamos una cena de camaradería», comentó Pueyo.
Los organizadores recuerdan que san Cristóbal es el patrón de «todos los que portamos un vehículo, no solamente de los transportistas». Esta festividad busca visibilizar y reconocer la labor de todos los que día a día se ponen al volante, ya sea por trabajo o por ocio. Pueyo enfatizó que la celebración es inclusiva, animando también a las mujeres a participar activamente en el desfile con sus vehículos.
«Podemos ser conductores, que yo creo que la mayoría lo somos, pero también tenemos que ser conscientes de que somos pasajeros de un medio de transporte», reflexionó Pueyo, subrayando la importancia del transporte en la vida cotidiana y la economía. Reconoció las dificultades que atraviesa el sector, especialmente por el aumento de costes y las regulaciones, y reivindicó el valor del trabajo del transportista, una profesión que, lamentablemente, ha perdido parte de su prestigio social. «Una manera más también de agradecer el trabajo de estos profesionales es acudir a esta celebración», concluyó.